Comarca del Poniente Granadino
La Comarca del Poniente Granadino se extiende en el extremo occidental de Granada, junto a las provincias de Jaén, Córdoba y Málaga.
Está situada en el punto de inflexión entre dos zonas geográficas diferentes de la región andaluza: las tierras bajas y calmas de la depresión del Guadalquivir, y las montañas encrespadas de la zona oriental. Aunque, su paisaje está determinado por los territorios con los que limita: la Subbética cordobesa al norte; la Axarquía de Málaga al sur; la vega de Granada al este; y el surco intrabético hacia las depresiones de Archidona y Antequera al oeste. El paisaje es un mosaico formado valles, vegas, sierras y campiñas.
16 municipios integran la comarca: Algarinejo, Alhama de Granada, Arenas del Rey, Cacín, Huétor Tájar, Jayena, Íllora, Loja, Moclín, Montefrío, Moraleda de Zafayona, Salar, Santa Cruz del Comercio, Villanueva de Mesía, Zafarraya, y Zagra.
La comarca del Poniente Granadino Abarca una extensión de 2.044 km2., y está habitada por 78.700 habitantes, siendo Loja el núcleo principal con 21.000 habitantes, seguido de Íllora con 11.000 y Huétor Tájar con 8.000. El núcleo menos poblado es Santa Cruz del Comercio, con 555 habitantes. Hay además 45 núcleos que no son cabeza de municipio, y mucha población dispersa en cortijos, especialmente en Algarinejo y en Montefrío. La densidad más alta de población es la de Huétor Tájar, y la más baja la de Alhama de Granada.
La principal actividad económica de la comarca es la agricultura. La industria de alimentación y confección complementan al comercio y al sector servicios, y se está desarrollando un sector turístico enraizado en el territorio.
La comarca del Poniente Granadino alberga el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama. Creado en 1999, se sitúa a caballo entre la Axarquía malagueña y el Poniente Granadino, donde se extiende por los municipios de Alhama de Granada, Arenas del Rey y Jayena. En él se encuentran las mayores cumbres del Poniente: el pico Maroma (2.065 m.), el Lucero (1.771 m.), y Navachica (1.832 m.), por donde campean cabras monteses entre vistas excepcionales. Su extensión es de 40.663 hectáreas, con grandes y escarpadas formaciones rocosas de carácter calcáreo en su mayoría. La dificultad de su relieve ha originado una gran riqueza ecológica. Muchas especies de su fauna forman parte del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, como el sapo partero (endemismo bético), y el camaleón, en peligro de extinción. De las 1.148 especies de plantas vasculares que viven aquí, el 25% son endémicas de la Península Ibérica, y un 2% son exclusivas de esta zona. Al menos desde el Siglo XIX, el Parque Natural ha sido un enclave preferido por los grandes botánicos. El Parque Natural es también Reserva Nacional de Caza.
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