Convento de Santiago (Guadix)
El convento de Santiago de Guadix se encuentra situado en el centro histórico de esta localidad, muy próximo a la colina donde se asienta la Alcazaba.
Emplazada frente al palacio de Peñaflor, constituye una de las construcciones religiosas de más importancia de la ciudad, tanto por la grandeza de su construcción como por la serie de arquitectos y escultores que participaron en ella.
Historia
Su origen da respuesta a un esquema funcional tripartito, que incluye el convento en sí, la iglesia parroquial y el espacio funerario.
En el año 1538 el arzobispo Gaspar de Ávalos creó la escritura de fundación del convento sobre unas casas que había comprado a Bernardino de Mendoza, y en 1542 donó sus propiedades, donde debía instalarse la comunidad religiosa, posponiéndose hasta 1562 al no encontrarse el edificio apto para ser habitado.
Al igual que ocurrió con otras iglesias de aquella época, la primera ocupación de ésta se ubicó sobre una antigua mezquita, construyéndose luego con el tiempo una nueva, que posteriormente el mismo arzobispo elevaría a la categoría de parroquia.
Iglesia
Diego de Siloé fue el encargado de llevar a cabo el proyecto y la construcción de la iglesia, estructurada en tres naves separadas por pilares circulares sin capitel y medias columnas adosadas. Las dos naves laterales aparecen rematadas en curva, con cuatro capillas cada una abiertas, algunas con arcos apuntados, y una Capilla Mayor de planta ochavada y reducidas dimensiones. A través de ella se accede a la antigua capilla de ánimas, con decoración pictórica en su bóveda perteneciente al siglo XVIII.
Exterior
Al exterior destaca su portada principal, de dos cuerpos de altura, de especial interés.
En su cuerpo inferior se abre el hueco de acceso mediante un arco de medio punto enmarcado entre dobles pilastras corintias sobre altos pedestales; entre las pilastras existen varias hornacinas aveneradas y superpuestas. Sobre las pilastras apoya un friso decorado con grutescos, como en las pilastras, y sobre el friso se levanta el cuerpo superior, con una hornacina central enmarcada entre una abigarrada decoración en la que se alternan los motivos decorativos: angelotes, dragones, monstruos y máscaras, además de medallones quizás referentes a los apóstoles Pedro y Pablo. Y más arriba, y a los lados, los escudos del obispo Antonio del Águila y de Carlos V.
Interior
En su interior destacan las cubiertas a base de armaduras de madera, que por su originalidad denota la presencia de Siloé en la obra. Para la Capilla Mayor se creó un arco artesonado, a modo de embocadura, formando bóvedas de pequeño tamaño con cordón moldurado. El fondo está formado por tres paños siguiendo la forma ochavada de la capilla y con casetones decorados en el fondo con motivos florales. La forma de esta armadura hace alusión a la concha del apóstol Santiago, también representada en la portada principal y en el retablo ya desaparecido.
El rico patrimonio mueble que albergaba la iglesia fue saqueado en los años de la Guerra Civil, entre 1936 y 1939.
Catalogación
El convento de Santiago de Guadix está catalogado Bien de Interés Cultural con categoría jurídica de Monumento, y así consta inscrito en La Gaceta de Madrid de fecha 4 de junio de 1931.
Bibliografía
Principales editores del artículo
- Carlosrs (Discusión |contribuciones) [2]
