Teodoro Padilla Lobato

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Nació en Zagra el 6 de enero de 1929. Persona especialmente dotada para la música. A los 16 años, siendo casi un niño se fue voluntario al ejercito a Madrid, muy pronto se dieron cuenta de su gran valía y pasó a formar parte de la Banda de Música del Regimiento de Leganes. Después paso destinado a Cádiz. Aquí destaco como un magnifico trompetista. Causo baja en el ejercito por enfermedad y volvió a Zagra. Aquí como tocaba muy bien el Armonio lo nombraron Sacristán de la Parroquia de San Lorenzo. Volvió a marcharse en esta ocasión a Cataluña y en Tarragona se matriculó como alumno en el conservatorio de música, terminando esta carrera en la especialidad de trompeta y acordeón. Opositó en el mismo conservatorio y sacó plaza como profesor. Compaginó su actividad docente con la de Director de la Banda de Música de la Cruz Roja de Tarragona.

Entre sus composiciones musicales podemos destacar:

  • Loja es ciudad (pasodoble), 1982
  • Mi bolero rítmico (bolero), 1982

Durante el tiempo que permaneció en Zagra tocaba a menudo en los Los silillos (Zagra) (fiestas en el campo), su acordeón y su trompeta. Cuando murió se vino a enterrar a su Zagra natal y un trovero de la Viña, como homenaje póstumo le dedico los siguientes trovos.

Trovo por la muerte de Teorillo

Por D. Antonio Lobato Ortega


A mi siempre me gusta
escuchar un instrumento,
la muerte es falsa y no es justa
y estos hombres de talento
debían de no morir nunca.
Cuando ya supe de cierto
Teodoro su defunción,
note tristeza en mi cuerpo
y dentro del corazón
un profundo sentimiento.
Al regresar de Manresa
la noticia recibí,
fue tan grande la tristeza
que en mi casa para mi
no hubo que poner la mesa.
Lo conocí de chiquillo,
después cuando fue mayor,
cuantas veces de silillo
y de fiesta en mi salón
vendría a tocar Teorillo.
Cientos de veces
vendria a tocar a mi salón,
como se las componía
cogiendo el acordeón
volvía la pena alegría.
Yo lo recordaré siempre,
tocaba de maravilla
y no olvidare su muerte
porque Teodoro Padilla
era amigo mío y pariente.
Murió Teodoro Padilla
y en el cielo un astro avisa,
el sol ni alumbra ni brilla
y hasta la luna se eclipsa
al salir por la Quintilla.
Donde nació, que se sepa,
aquel Teodoro Padilla
yo colocaría en su puerta
una placa pequeñilla
con su foto y su trompeta.
Yo a Zagra la felicito
si ese deseo lo consigo,
y se cumple el requisito
yo mandaría un donativo
que nunca seria el más chico.
De Tarragona una estrella
recorre una linea larga,
su luz alumbra y destella
y cuando pasa por Zagra
se pierde y no alumbra en ella.
Que lástima que haya muerto
un amigo verdadero,
que cogiendo un instrumento
no hay en el mundo entero
quien lo igualara en talento.
Tocó muy bien la trompeta
y a todos nos divertía,
fue una persona discreta
y para más garantía
zagreño de pura cepa.
Yo sentí un gran sentimiento
de que Teodoro muriera,
aún hace tiempo y lo siento
no llevo luto por fuera
pero lo llevo por dentro.
Cerca de Zagra nací,
en Zagra me bautizaron
lo poquito que aprendí
en Zagra me lo enseñaron,
y que más os puedo decir.
Yo lo llevaré en mi mente
hasta mi último día,
y cuando llegue la muerte
me guardaré esta poesía
de recuerdo para siempre.
Hasta los niños de teta
lloraron al morir Teodoro,
yo guardaría su trompeta
como si fuera un tesoro
para siempre en mi maleta.
Desde Mataró yo envío
ya que no puedo otra cosa,
como prueba que he sentío
a sus hijos y a su esposa
un pésame dolorio.
Aquí termina esta historia
no quiero que sea muy larga,
siempre estará en mi memoria
su cuerpo descanse en Zagra
su alma en paz en la Gloria.

Referencia

Fotografías y partitura cedidas por la familia de D. Teodoro Padilla Lobato.
Partitura: Arts Tarragona Dep. Legal T-420-1982

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