Semana Santa en Huétor Tájar
La Semana Santa en Huétor Tájar ha sido siempre muy bonita. Empezaba el Domingo de Ramos, nos íbamos a misa y salía la procesión de la palmas. Todos alrededor de la iglesia con las palmas y teníamos mucha ilusión, toda la semana era para confesar.
Historia
Desde que empieza la Cuaresma, cuarenta días antes de la Pasión de Cristo todos los miércoles se ayunaba, y el Jueves y el Viernes Santo se guarda la vigilia (no comer carne) ni desayunar por la mañana. Todo eso se ha terminado.
Ahora no cierran los bares ni las discotecas ni guardan la vigilia, es una fiesta como otra cualquiera, se trabaja hasta el jueves y es muy diferente a como era antes.
Ahora está empezando a resurgir de nuevo y congregar a mas feligreses partidarios de esta fiesta. Hay 3 cofradías, los hermanos y hermanas de Jesús que son unos 800, van los mayordomos poniendo orden en la procesión y los costaleros llevando el paso del Señor con la Cruz a cuestas. El Sepulcro y el Señor en la Cruz es otra cofradía y las hermanas de la virgen es la tercera en la cual también van las mayordomas y las costaleras llevando a la virgen de los Dolores son aproximadamente unas 500 y delante las hermanas de mantilla alumbrando.
Cuando llegaba el Jueves Santo todos nos íbamos a los Santos Oficios. Se ponía la iglesia llena y al término de los oficios ya sacaban la procesión. Salían las mujeres de mantilla y los penitentes iban vestidos de negro con capirucho.
El cortejo procesional transcurría por las calles mas principales del pueblo. La procesión salía a las 7.30 de la tarde y terminaba a las 11 de la noche, y después a las 12 de la noche salia otro desfile, la Procesión del Silencio y por las calles rezábamos el Vía Crucis y apagaban las luces de la calle y toda la gente alumbrando.
Al término de la procesión, que era aproximadamente a las 2 de la madrugada, la gente iba y venía toda la noche para velar al sepulcro y todo el viernes hasta los Santos Oficios. El Viernes Santo sale la procesión del Entierro con el Sepulcro y la Virgen. En los balcones se pone la gente a cantar saetas y era muy bonito, no abrían los bares ni tocaban las campanas ni poníamos la radio, las pocas que había.
El sábado a las 12 de la mañana todos los niños íbamos a por agua bendita para echarla en los rincones de la casa, para que se fueran los malos espíritus que hubiera dentro de las casas, ya el domingo, tocaban las campanas muy fuerte sin parar, anunciando ya la resurrección de Jesús, después salia y aún sale la procesión de los recaicos en la cual San Juan le dice a la Virgen de los Dolores que Jesús ha resucitado y ya finaliza nuestra Semana Santa en cuanto a festejos.
Es una fiesta muy entrañable sobre todo para los creyentes.
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