Fiestas de Lugros

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Semana Santa (Lugros)

La Semana Santa es una fiesta religiosa católica, donde se conmemora la Muerte y Resurrección de Jesús. No tiene una fecha de celebración fija, sino que cada año varía en función a las fases lunares.

Se rige por el calendario lunar, el Viernes Santo debe coincidir con el primer viernes de luna llena de la primavera, y con lo que los judíos llaman el día 14 del mes Nisan. Contando 40 días antes del Jueves Santo, obtenemos el Miércoles de Ceniza y a este periodo es al que llaman los cristianos Cuaresma.

El Miércoles de Ceniza comienza el tiempo de Vigilia (no comer carne durante las 24 h, que dura el día), éste se sigue manteniendo todos los viernes hasta el Viernes Santo, que es día de ayuno y vigilia.

La Semana Santa comienza el Domingo de Ramos, con la celebración de la Eucaristía que se suele oficiar por la mañana.

Al lado del Altar Mayor de la Iglesia, se depositan ramas de olivo, que al inicio de la Misa son bendecidas por el párroco. Una vez finalizada ésta, cada fiel coge una ramita que portará durante la procesión de la Virgen de Fátima alrededor de la plaza. Posteriormente cada una se la llevará y la colgará en su casa o en el corral.


Jueves Santo

La Eucaristía se celebra por la tarde, es de destacar el lavatorio de pies a 12 feligreses, rememorando el lavado de pies de Jesús a sus discípulos.

Por la noche se procesiona La Dolorosa y el Cristo con la Cruz, por las calles del pueblo.

Durante toda la noche, la Iglesia permanecerá abierta, para velar el Cuerpo del Señor, cuidando siempre que éste no quede solo.


Viernes Santo

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Por la mañana sobre las 9:10h se realiza el Vía Crucis, en el que se recorren el camino de las cruces, rezando.

En la tarde del viernes se llevan acabo los oficios.

Durante la noche se celebra la Procesión del Silencio, con la Cruz vacía, el Sepulcro y La Dolorosa.



Sábado de Gloria

Se celebra una Misa nocturna, que siempre será a media noche.

En la puerta de la Iglesia se realiza una lumbre (hoguera), de la que se enciende el Cirio Pascual, a la vez de éste, cada persona prende una vela y se dirige al interior de la Iglesia que estará a oscuras. Se inicia la misa a la luz de las velas, que seguidamente se apagarán para volver a lucir las del templo.

Durante la celebración de la liturgia y en el momento en el que el cura levanta las manos y pronuncia “Gloria”, comienzan a sonar cencerros, cacerolas, pitos, caracolas y aplausos de los fieles, es lo que se conoce como “La Cencerrá”.

Después de la misa se suele hacer una chocolatada, continuando el jolgorio alrededor de la hoguera y por las calles del pueblo hasta altas horas de la madrugada, celebrando la Resurrección del Hijo de Dios.


La Cencerrá

La tradición es tocarla el Sábado de Gloria. Esa noche, al finalizar la misa, se echaban las campanas al vuelo para celebrar la resurrección de Cristo. Según los vecinos, a principios del siglo XX, un año, el Sábado de Resurrección, la campana desapareció. Un ganadero del lugar, pensó que los cencerros de los animales sería una estupenda alternativa para suplantar el sonido de la campana. Al comentárselo a los demás, decidieron repartir los cencerros entre el pueblo para acudir a misa, y cuando el sacerdote dijera “Gloria”, que todos los cencerros sonaran estrepitosamente. Así se ha hecho hasta el día de hoy a pesar de que la campana se repuso posteriormente.

Al día siguiente, al amanecer, parte de la Iglesia la imagen del Niño Jesús, transportada por las mujeres y recorre el pueblo buscando a su Madre. Finalizado el recorrido, se para en la plaza principal y de la Iglesia sale la imagen de la Dolorosa que se encamina hacia su hijo, entre tiros al aire, cohetes, aplausos de los emocionados vecinos. Las dos imágenes se inclinan en un simulacro de abrazo y vuelven a recorrer las calles del pueblo ahora ya juntos.


Domingo de Resurrección

Durante la madrugada del sábado al domingo los niños y niñas del pueblo llevan en andas al Niño Jesús recorriendo las calles de (Lugros), tocando a la vez cencerros para llamar a los vecinos, que se van incorporando a la procesión. La imagen es conducida hasta el lugar llamado “El Cerrillo”.

Mientras los niños recorren el pueblo las mujeres hacen el Vía Crucis. Una vez terminado, se dirigen a la Iglesia. A las 9 de la mañana, sale de la iglesia La Virgen de la Inmaculada, avanzando hasta llegar a la esquina donde se produce “El Confrento” (el encuentro entre las dos imágenes) en las que se inclinan en un simulacro de abrazo. En ese momento se disparan tiros al aire, dando palmas y tocando los cencerros. Es un momento de gran júbilo y alegría.

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