Medio Ambiente y Recursos Naturales (Vegas del Genil)

Contenido

1 Mapa de Localización
2 Cómo llegar
3 Historia
4 Clima
5 Geología
6 Hidrografía
7 Flora y Fauna
8 Rutas de Interés
9 Rutas de Senderismo
10 Fotos
11 Vídeos
12 Enlaces Externos

Mapa de Localización

Cómo llegar

Las principales vías de comunicación son la Circunvalación de Granada (A-44) para el oeste y el norte; la Ronda Sur y la A-44, dirección Motril para el sur; la A-92 para el norte y el este; y la A-92G para Santa Fe y Atarfe. Siendo el Camino de Purchil la principal carretera de comunicación entre la circunvalación y la capital por una parte y Vegas del Genil por otra. Otras carreteras relevantes son las carreteras comarcales GR-SO-26 y GR-SO-4 que unen los municipios de la Vega entre sí.

Historia

En 1976 los municipios de Ambroz, Belicena y Purchil se fusionaron constituyendo Vegas del Genil.

El término municipal de Vegas del Genil, perteneciente a la provincia de Granada, se encuentra situado en la zona central de la comarca de la Vega de Granada. Se encuadra en el Área Metropolitana de Granada, situándose a unos 12 km. al oeste de la capital. Su extensión alcanza los 14 Km. cuadrados. La altitud sobre el nivel del mar oscila entre los 480 m y los 700 m.

Su fisonomía está dominada por una llanura aluvial del río Genil y varios afluentes, que define un paisaje impar, cuyo horizonte es recortado por Sierra Nevada, Sierra Tejeda, Sierra Gorda, la Sierra de Parapanda, Sierra Elvira y la Sierra de Huétor. La Vega está regada por un sistema de regadío heredado de la época andalusí, con acequias madre e infinitos ramales de riego que surcan sus tierras de labor. A su vez, se rodea de refrescantes alamedas salpicadas de secaderos de tabaco, antiguos cortijos, caminos rurales y un mosaico de cultivos que le confiere al entorno singularidad y excepcional belleza.

Clima

A grandes rasgos nos encontramos con un clima mediterráneo, de veranos secos y calurosos e inviernos ligeramente fríos. En otoño y primavera se producen las principales lluvias. El piso bioclimático se corresponde con el denominado: “Región Mediterránea”. Su climatología con una fuerte xericidad estival se caracteriza por temperaturas mínimas de los meses fríos no demasiado bajas. El termotipo corresponde con el denominado Mesomediterráneo marcado por una clara sequía estival y abundancia de heladas durante el invierno. La precipitación media anual es de 357mm (medida en la estación meteorológica del aeropuerto de Granada). La media anual de días con heladas alcanza los 49. La temperatura media oscila entre los 6,7 grados del mes de enero y los 24,8 del mes de Julio. La humedad que proporciona los cultivos y las brisas nocturnas contribuyen a que las medias mensuales de las temperaturas mínimas de los meses de julio y agosto no superen los 15º C. En contrapartida el elevado número de horas de insolación favorecen unas medias de las temperaturas máximas superiores a los 30ºC durante los meses de junio a agosto. La Vega de Granada cuenta con una media anual, de 2935 horas de insolación. Tan solo 30 horas anuales de insolación menos que Almería. La insolación media, la humedad del suelo y las altas temperaturas de los meses de primavera a otoño favorecen la productividad de los cultivos respecto a otras comarcas.

Geología

La Vega está constituida por materiales muy permeables: conglomerados y arenas, conocidos también como “materiales aluviales recientes, travertinos y playas” que cronoestratigráficamente pertenecen al Cuaternario. La unidad estructural indica que son materiales de depresiones postorogénicas.

Son los materiales aluviales de la capa externa los que confieren las principales características paisajísticas y agrícolas de la Vega: tendencia a la llanura y los relieves suaves, gran permeabilidad que posibilita la formación del acuífero de la Vega, alta capacidad para retener la humedad y los nutrientes, riqueza de los suelos y una relativa facilidad para las tareas de laboreo.

Hidrografía

En el extremo Noreste del término municipal transcurre el río Genil, con un recorrido que no supera los dos kilómetros. En este tramo desemboca el río Dílar. Junto a los ríos Genil y Dílar hay que nombrar al arroyo del Salado, que transcurre por el Oeste del termino municipal, procedente de la Malahá. Las suaves pendientes apenas han dado lugar a la formación de barrancos y otros cursos de agua. Por éstos, solamente transcurre el agua durante los periodos de lluvia. Cabe destacar el barranco del Francés Cañalizos y el barranco de la Jabonera. Bajo el subsuelo de Vegas del Genil se emplaza parte del acuífero de la Vega de Granada, unidad hidrogeológica conocida como Depresión de Granada, y que constituye el principal acuífero de la provincia. Los materiales del término municipal son muy permeables, lo que hace que se considere como zona predominante de recarga de dicho acuífero. Los sedimentos aluviales recientes que componen la mayor parte del territorio, permiten una infiltración elevada de pesticidas y abonos inorgánicos, facilitando la contaminación del acuífero y posibilitando una merma de la calidad de sus aguas. La recarga del acuífero depende parcialmente del sistema de riego tradicional, descendiendo su volumen de agua en la medida en la que el riego desapareciera con las prácticas de laboreo. La forma de distribución del agua a las fincas se realiza a través de una red de acequias considerada como parte del patrimonio cultural del municipio. Cuyo origen se remonta a la época musulmana. La acequia principal es la Tarramonta, que da nombre a la Comunidad de Regantes de La Acequia Tarramonta. La red de acequias, está además, formada por ramales de la principal y otras acequias de menor peso, entre las que podemos nombrar el Ramal de la Trompeta, la Acequia Alta, Brazo del Río Dílar, Caz del Tercio, Ramal de Sotillo, Acequia del Tercio, Acequia de Belicena, Ramal de Dílar, Canal del Cacín y la Acequia Real.

Flora y Fauna

La altitud entre 480 y 700 m sobre el nivel del mar y la latitud (37º N), junto con el clima mediterráneo, constituyen las principales variables que influyen en la conformación de la fauna y la flora. Los ecosistemas y las especies de fauna y flora están muy influenciadas por el alto nivel de intervención del hombre durante todo el periodo histórico. La mayor parte de la superficie no urbana corresponde con llanuras ocupadas por labores agrícolas en las que predominan cultivos de herbáceas como el tabaco, el maíz, cereal de forraje y las hortalizas e isletas de choperas. Hacia el oeste, el terreno va tomando pendiente, en forma de suaves laderas que buscan la cima del cerro de los Pedernales (732 m.s.n.m.). Esta zona al estar peor abastecida de agua de riego se ha dedicado tradicionalmente al cultivo del olivar y de viñas. Debido a las bondades del terreno y a que las explotaciones agrarias conforman un mosaico de cultivos, las especies vegetales cultivadas presentan una gran variedad, en especial las herbáceas. Entre las leñosas podemos nombrar el olivo y el álamo entre las más abundantes, pero también es fácil encontrar kakis, membrillos, higueras, y otros frutales. No podemos pasar por alto la existencia de un excepcional castaño ni la existencia de especies naturales en los lugares no cultivados como algún olmo. Las orillas de los ríos Genil y Dílar y el arroyo Salao han servido de asentamiento a bosques de ribera y vegetación lacustre, que también han sido favorecidas por la amplia red de acequias. Las comunidades vegetales asociadas a dichos cauces han variado con frecuencia debido a la intervención humana y a los vaivenes de los cursos del agua.Los terrenos en barbecho y los no cultivados, gracias a la abundancia de agua y a la riqueza de la tierra, rápidamente son colonizados por todo tipo de especies de pradera. Las aves suponen el grupo de vertebrados con mayor variedad de especies debido a la alternancia de diferentes hábitas: cultivos de herbáceas, bosques de álamos, riveras de ríos y acequias, olivares y entornos urbanos. Facilitando los secaderos el asentamiento de rapaces nocturnas.

Rutas de Interés

Existencia de un carril-bici paralelo a la carretera utilizada como comunicación entre los distintos asentamientos diseminados. Se podría integrar en un itinerario ecológico-agrario-cultural de recorrido circular utilizable para todas las personas.

Rutas de Senderismo

Ruta de las Alquerías: Esta discurre por los caminos de la Vega y pasa por los tres núcleos urbanos que componen el municipio, mostrando al visitante el valor paisajístico del entorno rural y el patrimonio tradicional de cortijos y secaderos que se conservan y que suponen un importante recurso susceptible de ser explotado como atractivo turístico.