Iglesia Parroquial de la Anunciación (Dólar)

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Nombre del edificio	Iglesia de Nuestra Señora de la Anunciación
Localización	Plaza de la Iglesia, Dólar
Cronología	Siglo XVIII
Arquitecto	Desconocido
Propiedad	Eclesiástica
Catalogación

Situada en la Plaza de la Iglesia, la Iglesia de la Anunciación fue edificada en 1673.

Subsistió la mezquita musulmana hasta el año 1500. Posteriormente se destruyó y se construyó en su solar una Iglesia para el rito cristiano. A mediados del siglo XVIII se inició la construcción de una iglesia de mayor capacidad, la actual, en la que destaca su bóveda, así como la cúpula barroca sobre pechinas del presbiterio. La influencia arquitectónica de la Catedral de Guadix es patente.

Descripción

IGLESIA DE LA ANUNCIACIÓN, 1.522-1.554

La iglesia se asienta en un lugar ocupado antaño por la Mezquita árabe, que adaptada al culto, cumplió las carencias y funciones litúrgicas, ya que era imposible hacer un templo en el año 1.489, cuando fue sometido Dólar a las tropas reales.

El culto y asistencia espiritual de sus moradores fue habitual, desde la reconquista, y así en el mes de Junio de 1.505, es erigida formalmente la parroquia por el facultado Arzobispo de Sevilla, Don Diego de DEZA. A partir de estas calendas, el Obispo Don Francisco García de QUIXANA, pone las bases para ir levantando poco a poco; Templos, Capillas, y Ermitas. A partir de 1.522, los sucesores de García de QUIXANA, concentran el proyecto y comienza la construcción. En 1.554, la Iglesia de Dólar estaba terminada, y el Obispo Don Martín de AYALA, hizo y celebró SINODO DIOCESANO.

Se construyó con nave de cañón y arco toral escazano, que separaba la bóveda del Altar Mayor, donde se colocó posteriormente un magnífico retablo barroco, construido artesanalmente por Miguel Ruíz en el año 1.557. La techumbre de la nave de artesonado mudéjar de par y nudillo con sus rastras, el apoyo en el mismo grueso de las paredes de armazón, con capillas arqueadas de poca profundidad, después ampliadas a lo que es hoy. La de la Virgen del Carmen, con su camarín y girola. Toda su traza se debe a Francisco Antero en el año 1.445. Fue rematada por Ambrosio de Villegas en 1.554, en especial la fachada. Dos grandes puertas con arcadas de ladrillo; la principal al Este, la secundaria al NORTE, esta estuvo mucho tiempo cerrada. La amplia nave central, bóveda de cañón fajeada con lunetos. Hoy todo está enjalbegado. El retablo no existe, fue quemado en la guerra civil. El Altar Mayor y la Capilla, también fueron destruidos en aquellas fechas.

El párroco Don José Gómez Casas, mandó reparar suelos y capillas, y colocar en el Altar Mayor, como retablo un extenso paño de placas rectangulares de mármol, un tanto oscuro, y mesa para celebraciones, con graderío de piedra marmórea de Macael (Almería)

REPARACIÓN DE LA TORRE

La Torre y los tres cuerpos que conforman la Iglesia, era buena obra, pero quizás el mucho peso de su cabecero, unido a la pendiente y salida principal del templo, hace que se cuartee. Inicialmente la Torre era más pequeña, semejante a la de todos los pueblos del Marquesado, pero fue suplementada en cuanto a altura, para distinguirse de las demás, y ello fue el causante de las grandes grietas, por lo que apremiaba su reparación.

El día 29 de Marzo de 1.876, la Junta Local de reconstrucción de Templos, eleva un memorial-instancia, que suscribe el Señor Cura Párroco Don Francisco González Martínez y el Alcalde Don Nicolás García Molina y vecinos. Levantan un acta en la que se hace constar la urgencia de la reparación sin demora, porque está la "Torre cuarteada en su parte central", así se le hace constar al Señor Obispo y Junta Diocesana. Se adjunta con el Acta un informe del maestro de obras de La Calahorra, Antonio Arques Martínez.

Hay parte de feligreses, que a la vista de las "grietas que tiene la Torre", piden sea demolida y se levante otra. De esta misma opinión, es el maestro de obras. El cura lo comunica a Guadix, el día 30 de Junio de 1.876.

El día 14 de Julio de 1.876, el Maestro de Obras Arques, hace un presupuesto solo de reparación, no de demolición, que alcanza 4.382 reaales, pero la Junta insiste en que se derribe y hacen dos memoriales.

El mismo día, 14 de Julio de 1.876, dando sus razones y además haciéndose eco de lo que Guadix pide, es la colaboración de todo el pueblo, que ellos aceptan, en la medida que les sea posible. Y, acompañan dos gráficos, uno con el deterioro y otro más detallado a escala. Y, otro de 29 de Agosto de 1.876, donde el presupuesto asciende a 10.114 reales, de los que el pueblo puede aportar hasta 4.300 reales y el resto de 5.814 reales el Obispado.

La obra se llevó a cabo con el segundo presupuesto, se reforzaron los cuatro paredones de la Torre en su base y sostén en todo el cuerpo de antigua construcción, demoliendo la parte terminal, que se aligera bastante de peso y se le hacen unos apoyos contrafuertes al pie de la base.

Nuestra Torre airosa es, hito de una gran panorámica de todo el Marquesado del Zenete, desafiando al derruido castillo-fortaleza, que muchas veces visitó el experto moro ABEN-SHPELA, que gozó de la gran amistad del primer Marqués del SENED, Don Rodrigo de Mendoza.