Fiestas de moros y cristianos
El pueblo de Zújar celebra sus Fiestas con alegría, devoción y fe a la Virgen de la Cabeza Patrona y Señora de Zújar. El Sábado por la mañana todo Zújar está esperando ansiosamente la salida de Nuestra Patrona, con emoción y gozo. Sacrificios y plegaria se adhieren en estos cuatro días de Fiestas que esperan la solución de los problemas de los que derivan sus ofrecimientos. Cansados y atentos miles de peregrinos se acercan a nuestras inmediaciones para encontrarse cerca de su redentora acompañándola con ternura y tesón para que deslumbre sobre estos su bendición. Desde el Camarín nos deslumbra su esplendor y hermoso rostro hacia esparcir lágrimas y deseos de acercarnos a ella y poder compartir nuestro gozo y alegría. Es tanta la emoción que se vive en estos cuatro días que los pesares de los fieles se olvidan convirtiéndose en amor hacia ella. Con el fin de que nuestra patrona nos ayude el pueblo hace cualquier sacrificio desde subir andando descalzo, con un niño a cuestas e incluso de rodillas, no importa, ya que nuestro amor hacia ella va por encima de todo. Todo Zújar escucha el sonido de los tambores adorando a Nuestra Señora con un festín infinito que recorre todo el pueblo. En estos cuatro días no hay casa en que no se haga presente la Imagen de Nuestra Patrona La "CHIQUITILLA" y en la que no la acojan con ternura y cariño. Visitada por miles de personas sacan a la Virgen del Camarín acompañada por aplausos de toda la gente que con alegría, la aclama y la adoran, la gente llena sus corazones con una felicidad infinita que muchas veces se manifiesta con suspiros y lágrimas. Ya en el Domingo la gente se prepara, decenas de personas tocan de madrugada los tambores que recorren un camino hasta llegar a la Plaza, donde en la Iglesia se encuentra ella, Nuestra Patrona, allí la esperan con ansiedad ellos y otras muchas personas más. Desde la Plaza hasta la Erilla Empedrá la acompaña la Música de la Banda. Una vez allí se emprende el camino hacía la Ermita del Cerro Jabalcón, donde los tambores la acompañan todo el camino y la gente va con alegría para que no se sienta sola, sino todo lo contrario, para que se sienta arropada por la alegría y el cariño de la gente. Miles y miles de personas la esperan en la Ermita del Cerro con fe, alegría y mucha paciencia porque saben que esperarla vale la pena, ya que podrían, cuando llegue, adorarla y bendecirla. Durante la Romería de la Virgen de la Cabeza se hacen sacrificios y promesas duras y dolorosas que emocionan a la gente que las presencia. Cuando llega toda la gente se vuelca hacia ella y disfrutan viendo su hermoso rostro, la pasean por el Cerro Jabalcón y le hacen todo tipo de alabanzas. Toda la gente disfruta en la Romería de la Virgen de la Cabeza y no hay un solo rostro triste, todos están llenos de felicidad y inmensamente contentos como nadie que no estuviera allí, se podía imaginar. Llega la hora de bajar a la Virgen de la Cabeza del Cerro Jabalcón y acompañada por muchísima gente y por la música de los tambores llegan a la Erilla Empedrá, donde la gente que no ha podido subir al cerro, la esperan con orgullo a su Patrona de Zújar la Virgen de la Cabeza, también la esperan los Moros y Cristianos, la Banda de Música etc, que llevan a la Virgen en procesión hasta la plaza, donde la dejan para la Representación del Cautiverio y Rescate de la Virgen "Los Papeles." Estos papeles se llevan haciendo desde hace muchos años y todavía se hacen para Nuestra Patrona, son sin duda una espectacular obra literaria de autor desconocido. El Lunes se hacen las procesiones una por la mañana y otra por la tarde, en esta se le sube a la Ermita de Capallón, pero siempre acompañada por los Moros y Cristianos, la música de la Banda y los cientos de personas que no quieren dejar de acompañar a su Virgen Patrona de Zújar, ni dejar de estar con ella ni un solo minuto. Allí se terminan de *Representar Los Papeles*. Terminados estos la bajan en procesión hasta la iglesia para dejarla descansar y poder por la mañana seguir adorándole. El Martes se le vuelven a hacer las procesiones por la mañana y por la tarde. Por la tarde la suben de nuevo a Capallón desde se celebra una ofrenda floral, en esta muchas personas le suben flores y así le demuestran su afecto, cariño y ternura. Allí le baila unas personas, la mayoría niñas, y terminados los bailes se la bajan a la Iglesia pero ya no es tanta la alegría y las lágrimas se van apoderando de todos. Al llegar a la Iglesia todos se ponen tristes y hasta los más fuertes derraman sus lágrimas de los ojos ya que tienen que despedirla, toda la Iglesia se llena de pena y tristeza, es tanta su devoción que no pueden dejar de pensar en ella, hasta los niños más pequeños y los que son un poco más grandes lloran y se entristecen. Aunque queramos dejar de llorar nuestros ojos no lo permiten. Toda la gente se vuelca sobre la Virgen para estar lo más cerca posible de ella en los últimos momentos de las Fiestas de Moros y Cristianos, le adoran, rezan y cantan con un amor muy grande. Salimos de la Iglesia llorando desoladamente y solo nos consuela una cosa, que dentro de un año podremos disfrutar las Fiestas de Nuestro Pueblo otra vez. Todos los Zújareños esperan el mes de Abril para las Fiestas en honor a la Virgen de la Cabeza, y es que son muy importantes para el pueblo de Zújar, yo creo que las más importantes de todas donde la devoción de todo el pueblo hacía la Virgen hace que estos días sean muy importantes para nosotros y hacen que muchos de nuestros dolores se olviden y que nos llenemos de alegría, felicidad, gozo etc. Las Fiestas de Moros y Cristianos tienen su origen por las conquistas de los Reyes Católicos y se llevan celebrando desde hace cientos de años quizá por eso tienen esa gran importancia para los Zújareños. El pueblo no sería lo mismo sin ellas ni tampoco sin nuestra Patrona la Virgen de la Cabeza.
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