El boli

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Bases del juego

Los equipos se turnan alternativamente en tirar y cazar. Todos los jugadores del equipo se sitúan junto a la maruca (son dos piedras paralelas colocadas verticalmente de manera que en la parte superior de ellas se pueda situar el boli (es un cilindro de madera de entre 15 y 20 cm. De longitud y 2 o 3 mm de diámetro, las dos puntas están recortadas cónicamente), levantarlo con la vara, que habrá de pasar entre ellas), y con la vara levantan verticalmente el boli con un golpe seco y mientras está en el aire, lo vuelven a golpear en sentido horizontal, hacia delante. En una segunda fase del juego, este tiro ha de hacerse dando el primero de los golpes citados mientras el brazo que sostiene la vara está entre ambas piernas.

Cazar puede consistir en dos acciones: 1. Coger el boli lanzado por el equipo que tira mientras está en el aire. Puede cogerse directamente al vuelo o después de botar en el suelo pero nunca empujarlo ni desplazarlo intencionalmente en cualquier dirección. 2. Desde el punto hasta donde ha llegado el boli lanzado por el jugador del equipo que tira (no en los pegos), hay que arrojarlo hacia la maruca y alcanzarla. A estos efectos, la vara forma la parte de la maruca y habrá que situarla entre ella inmediatamente después de tirar. Cuando se caza el boli, el jugador que tira queda eliminado hasta el siguiente turno; si no se caza, ese jugador tiene derecho a los pegos.

Terreno de juego

El terreno de juego del boli es ilimitado, se sabe donde empieza pero nunca donde acaba, aunque sí es conveniente elegir como terreno de juego una zona despejada de al menos 30 m de largo por 20 m de ancho. La única diferenciación que se puede hacer del terreno de juego consiste en delimitar la zona que está delante y la que está detrás de la maruca.


Equipos

Al boli juegan dos equipos con el mismo número de jugadores, que deben ser dos como mínimo.

Los pegos

Los pegos consisten en tirar cuatro veces desde el suelo, no desde la maruca. El primero de ellos ha de lanzarse desde justo delante de la maruca y la situación del boli será la que resulte de lanzarlo con la mano desde la propia frente sin doblar las rodillas el lugar donde está el boli para tirar un pego podrá limpiarse de gava o ramas si uno de los jugadores del equipo que tira, grita “limpio” en el momento en que se adquiere el derecho a tirarlo. No se podrá limpiar si es uno de los jugadores del equipo que caza el que, en idéntica situación, grita antes “sucio”. Un jugador del equipo que tira adquiere el derecho a jugar pegos cuando, después de su primer tiro, su boli no es cazado, siempre que el boli haya salido hacia delante y lo haya lanzado a más de cuatro varas de la maruca. Los pegos pueden también ser cazados en el aire o rebotados.

Puntuación

La puntación necesaria para ganar cada partido se fija previamente de mutuo acuerdo entre ambos equipos y consta de un número determinado de puntos tirando por encima de la pierna y la mitad de este número por debajo de la pierna.

El equipo que tira suma puntos lanzando, en los pegos, el boli lo más lejos posible de la maruca (siempre hacia delante). Sumará un punto por cada cuatro varas que consiga alejar. Si no consigue un mínimo de cuatro varas, ese jugador queda eliminado hasta el siguiente turno. El jugador que ha tirado los pegos, al acabar el cuarto, pedirá los puntos que considere oportunos, si el otro equipo está de acuerdo, se suman en su cuenta pero si considera que la distancia alcanzada es menor que el número de tantos multiplicado por cuatro varas, tendrá derecho a medirlas. Si la hay, el jugador que tira los pegos, se suma los puntos y disfruta de otros cuatro pegos y si no los hay queda eliminado hasta el siguiente turno. El equipo que caza, suma puntos cazando el boli en el aire: diez puntos si todavía no ha rebotado en el suelo y cinco si ya lo ha hecho. La cantidad de puntos conseguida debe coincidir con la fijaba como límite para ganar. Si cualquiera de los equipos se pasa, debe volver a empezar desde cero, bien por encima de la pierna, bien por debajo si y había llegado.

Referencia

Aportado por Francisco Emilio Molina Rodríguez.

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