A contar los frailes
Hay frases y antiguos que traspasan las generaciones y se convierten en un recuerdo común. Sin embargo, en muchas ocasiones es difícil encontrar un origen histórico para ellos. Un ejemplo de ello es el refrán «A contar los frailes» que, usualmente, se completa con «que dicen que falta uno», una frase muy común en diversas localidades de Andalucía [1].
Esta frase es normalmente utilizada para describir que alguien se ha marchado sin dar explicaciones, usualmente dando a entender que quien dice la frase conoce de alguna manera adónde se ha ido. También era frecuente escuchársela decir a los padres cuando sus hijos preguntaban por algo en repetidas ocasiones[2].
El origen es difícil de concretar pero en diversas fuentes podemos leer en esta frase una alusión a cómo la Iglesia solía solucionar sus problemas sin dar explicaciones al público. [3] Concretamente, se relaciona con los claustros cerrados que se relizaban en monasterios en épocas de hambrunas, donde la alta mortalidad obligaba a hacer recuentos continuos por si se habían producido nuevas bajas. En caso de dichas bajas, había que volver a calcular el reparto de comida entre los miembros que aún sobrevivían.
Cuando el clero estaba en público y se ausentaba, la gente solía pensar que había ido «a contar los frailes, que dicen que falta uno».
Es un claro ejemplo de cómo una frase original puede ir transformando su sentido con el paso del tiempo y el uso por parte del vulgo.- ↑ http://www.diariojaen.es/opinion/articulistas/a-contar-los-frailes-HN2935229
- ↑ http://fititu.es/definicion/colaborador/a-contar-los-frailes/
- ↑ http://atunara.com/atunatiki/tiki-index.php?page=A+contar+los+frailes