Aceite (Beas de Granada)
Una vez terminada la recogida de la aceituna, cada agricultor lleva su cosecha a la almazara y la almacenaba en uno de los trojes que había en el patio hasta que le toca moverla. De esta forma obtenían el aceite de su propia aceituna. Esta costumbre se fue perdiendo, y las aceitunas se pesaban y después se molían todas juntas, recibiendo el agricultor los kilos de aceite que le correspondían. Según el rendimiento de la aceituna de ese año, lo que dependía de la calidad de la cosecha. En las almanzaras tradicionales se molturaba la aceituna en el molino de rulos o piedras, movido por bestias o por rodeznos movidos por la fuerza del agua, aunque con el tiempo se empezaron a utilizar turbinas. El molino estaba formado por un empiedro o solera, que era una piedra de granito cilíndrica que estaba fija al suelo. Encima se situaban tres o cuatro muelas troncocónicas del mismo material que eran las encargadas de moler las aceitunas.La aceituna pasaba por gravedad desde el patio de pesada hasta la tolva de recepción, y de ésta mediante una hélice vertical iba cayendo al molino, donde el movimiento continuo de las muelas la convertían en una pasta que iba saliendo hacia un canal exterior del alfarje, en el que se acumulaba la aceituna molida, de allí una paleta la iba llevando a la batidora, donde se batía y se calentaba la masa, que no debía sobrepasar los 25-30º . El método tradicional utilizaba un sistema de prensas para obtener el aceite. La mezcla que salía de la batidora se sacaba con un dornillo de doce a catorce kilómetros de capacidad , y que se extendía en un capacho circular de esparto con un agujero en medio. Los capachos se iban colocando en una vagoneta con una aguja central, apilando unos encima de otros formando una torre a la que se llama cargo.La vagoneta se introducía en una prensa a la que se le aplicaba presión en la parte inferior mediante una bomba, comprimiendo los capachos contra el puente superior. A veces, para aprovechar mejor la aceituna, una vez prensada se rompía el orujo de las capachas, se le echaba un poco de agua caliente, a lo que se llamaba `` hacer las migas´´ y se volvía a prensar esta mezcla. El aceite que salía de esta segunda presión era de peor calidad. Como el método de presión se obtenía, por un lado, el orujo bastante seco y por otro una mezcla de aceite, jamila y turbio, que se recogía en una serie de pozuelos de decantación o aclaradore s donde la jamila se iba al fondo y el aceite quedaba flotando encima del agua , al tener mejor densidad. Los pozuelos eran una serie de depósitos con base cónica que favorecía el sangrado de los residuos. Una vez el aceite estaba limpio pasaba a los bidones de almacenamiento. El molinero recibía la maquila, que era un porcentaje en especie en cobro por la molienda. diario se utilizaba una alcuza de hojalata
COSTUMBRES
El aceite se guarda en tinajas de barro u orzas en una habitación oscura de la casa. Para guardar el aceite de uso diario se utilizaba una alcuza de hojalata. Relaciona con el aceite, antiguamente existía en algunos de los municipios de la comarca una curiosa tradición , los olivos de las ánimas. En algunas fincas con olivos, se reservaba la cosecha de aceituna de dos o tres olivos determinados,siempre los mismos. El aceite obtenido de esa aceituna se utilizaba para rellenar las lamparillas de las ánimas, que se mantenían encendidas durante todo el año en la iglesia del pueblo.
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